La
complejidad cultural es precisamente lo complejo de un significado o una interpretación
socio-cultural, y en el caso de la definición de la ciencia, no podría ser mas
evidente lo complejo que es la significación social.
La
palabra “Ciencia” ha devenido en un significado de “veracidad” e
“indiscutible”. Hace mucho tiempo que perdió el estatus de constructora y
organizadora de conocimiento; paradójicamente, la gente comienza a entintar a
la ciencia con matices mágicos, le invierte la capacidad de crear y explicar
todo, y basta con que mencionen la palabra ciencia para que no pidamos mayores
explicaciones.
Tal
es el poder que creemos que tiene la ciencia. Si alguna vez alguien tiene
problemas convenciendo a alguien acerca de prácticamente lo que sea, lo único
que tiene que hacer es comenzar a utilizar la palabra ciencia
indiscriminadamente dentro de su argumento, porque en cuanto entramos al
terreno de la ciencia, el argumento se puede tornar tan extensivo y complicado,
que la gente prefiere dejarlo por la paz.
¿Esto
es culpa de la ciencia? Por supuesto que no. Es nuestra culpa como científicos
por no difundir correctamente la idea de ciencia.
Todo
esto es bien conocido por cualquiera que desee convencer a un grupo de gente de
algo que puede parecer contra-intuitivo. Saben que el termino ciencia entendido
en la modernidad es una multiherramienta para darle credibilidad a
prácticamente cualquier cosa. De esa forma tenemos el caso de las niñas de
Chalco, o el investigador nigeriano que utilizo imanes para probar que la
homosexualidad esta mal.
Comenzando
a dilucidar los detalles de cada caso, hay instancias en que la forma en que se
utiliza el termino “ciencia” como justificación llega a ser cómico, en otras
ocasiones llega a ser deprimente.